- "Un Iphone. Mi hijo me lo regaló para mi cumpleaños"
- "Ah...¿y para qué sirve?
- "No sé...es muy complicado para mí"
- "Mmmm, ahora todo es complicado ¿para imprimir por dos lados la hoja se pone para arriba o para abajo? ¿sabes que se puede "bajar" una película por Internet? ¿cómo lo hago para...?"
- "¡¡¡Basta!!! Me supera todo eso. Todo lo de última generación dejó de ser simple"
- "No, Lucho. Lo que pasa es que la última generación de simples fue la nuestra".
La era digital nos une y separa cada día más. La tecnología, en vez de ser una herramienta al servicio del hombre, se ha transformado en un fin en si misma. Hoy la gente manifiesta su sentimiento de pertenencia a través de la necesidad de poseerla para sentirse parte integrante del grupo que la rodea. Muchos proyectos se diseñan hoy con ese fin...y tienen éxito. Hoy vemos como una marca muy pero muy prestigiada de computadores (el mío es uno de ella) publicita más el diseño de la cubierta del laptop que sus especificaciones técnicas. Esto obliga al evaluador de cualquier proyecto a considerar el concepto ampliado de producto, ya que el éxito podrá estar dado por su apariencia, status que otorgue u otro atributo muy distinto al de su fin último. ¿cuál es el costo de agregarlo al producto?¿cuánto la inversión necesaria para publicitarlo? Si este factor influye en el resultado de la rentabilidad, no podrá obviarse del análisis.