Todo es relativo

Cuando nos juntamos un grupo de amigos, le comenté a Carlos (sí, el mismo, el "Chico piano") que lo vi salir muy molesto de la Iglesia el domingo pasado. "Acaso no te vio Dios?....anda a misa de 9.00, la de los niños, así nadie te tapa", le dije.
- "No -me contestó- todo lo contrario. Lo vi y conversé con Él".
- "Entonces deberías estar muy contento, Chico" -le respondí.
- "No, pues. Lo que pasa es que al rezarle le dije que como para Él mil años son un segundo y un millón de dólares son un centavo, porqué no me prestaba un centavo suyo para resolver todos mis problemas con mi negocio, y me respondió: con todo gusto hijo mío, sólo espera un segundo o que encuentre a Zembo".

Mucha gente consulta permanentemente la razón de que no incluya un capítulo acerca del tratamiento de la inflación en la evaluación de proyectos. Tengo cuatro razones para no hacerlo:
a) Los proyectos de inversión se evalúan en períodos largos de tiempo (diez años, generalmente) y la posibilidad de estimar la variación anual del índice de precios al consumidor es casi cero.
b) Si se pudiese determinar, el IPC representa la variación de precios de una canasta de bienes de consumo familiar, la cual no tiene porqué representar a la estructura de costos y beneficios particulares del proyecto.
c) Aún si así fuese, al aplicarse tanto a los flujos como a la tasa de descuento para transformarlos de valores reales a nominales, su efecto se elimina por la simplificación matemática entre el numerador y el denominador.
d) Porque lo que correcto sería calcular la variación de costos relativos de cada uno de los componentes del proyecto. Generalmente, el costo de averiguar este dato es mucho mayor al beneficio de conocerlo, dado que hoy existe la posibilidad de trabajar con datos en moneda constante, determinar cuál, al variar, se correlaciona más con el cambio en la rentabilidad y, por lo tanto, sensibilizar el VAN a los cambios que resisten estas variables críticas, que generalmente no son más de dos o tres. Este análisis de sensibilidad es más fácil, permite concentrar esfuerzos y entregar una más confiable información al inversionista al analizar la posibilidad de que dicho cambio relativo se produzca. Más aún, cuando al variar un costo, por ejemplo, existe muchas veces la opción de trasladar ese cambio a precio, por lo que su cambio es irrelevante al mantener la posición relativa de ambas variables.
PB: Zembo, si lees este blog, comunícate urgente con el Chico

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias profe...me queda claro. ¿pero cómo puedo hacer esa sensibilidad? ¿a qué variables la aplico? ¿cómo?

Oscar manuel CÁRDENAS MAULÉN dijo...

Estimado profesor Nassir.
Concuerdo con Ud. en que en estricto rigor pudi�ramos hacer un c�lculo de variabilidad de los bloques de componentes que conforman el proyecto, para luego analizar su comportamiento en el futuro y hacer correcciones solo a los �temes afectados por variabilidades externas.
Pero que pasa con la actividad interna, pese a haber hecho los esfuerzos para ajustar los costos y flujos proyectados (por variables externas), no cree que debieramos hacer un esfuerzo para que sea representativo, sea el caso de una empresas de productos, ajustar por medio de un �ndice los costos de produccion, o sea, aquellos en que por razones de mal funcionamiento o errores pudieras afectar las utilidades aumentanto los costos de producci�n, cada empresas sabe en donde le apreta el zapato y podr�amos utilizar este dato para ajustar los flujos.Luego tendremos un variable de ajuste del flujo de caja pero por variables internas.(a lo mejor es m�s aplicable a empresas en marcha pero de igual forma, todas las empresas tienen p�rdida por este item)
atte
Oscar CARDENAS M.

Nassir Sapag Chain dijo...

Sí Oscar...debemos incorporar todos los estándares disponibles como ineficiencias, fallas, devoluciones, etc. Pero no tienes cómo adivinar los cambios en los precios relativos futuros para reflejar correctamente el impacto particular de la inflación. Lo demás que señalas, sin ninguna duda hay que hacerlo.
Un abrazo

Nassir Sapag Chain dijo...

Roberto...la verdad es que me resulta imposible explicarlo en un espacio tan breve como este. La sensibilidad la explico en un capítulo completo de mi libro de Pearson. Al correr un simulador como Crystal Ball o SimulArsoft, puedes encontrar cuáles son las variables que muestran mayor corrrelación entre su cambio y la variación del VAN. La forma más usual de calcularlo es viendo el rango máximo de variabilidad (VAN=0) que resiste esa variable y después analizar la posibilidad de que ese rango se alcance.

Héctor Rodríguez Pérez dijo...

Estimados:

Los modelos de sensibilidad, que usted nos indica en su libro, son bastante amigables, y de una utilidad tremenda. Por lo que creo, Roberto, no deberías tener problema porque con un simple formula en una planilla Excel, te entregará el resultado de forma inmediata. El único detalle, es SER bastante cuidadoso, en la VINCULACIÓN de cada DATO dentro de la tabla, de lo contrario, no te entregara el valor REAL de las variables a sensibilizar. (Si lo haces en Excel).

Es lo único que puedo aportar esta vez, estimado don Nassir. Aunque económicamente hablando, podemos de acuerdo a los estados de la economía, saber cuándo es OPORTUNO O NO implementar un proyecto. Pero proyectar con modelos de predicción un efecto INFLACIONARIO en los flujos, me parece poco probable de hacer, no porque no se pueda intentar, sino por la poca certeza que nos entregaría el modelo, ya sea por el numero de variables en juego como el riesgo sistemático que no se puede diversificar ni reducir. EL IPC se estima en base a 483 elementos que componen la canasta familiar, que a mi gusto NO ES MUY REPRESENTATIVA para el cálculo de este indicador.

Saludos,

Héctor.

Nassir Sapag Chain dijo...

Hay una cosa muy importante en lo que señalas Hector....los software disponibles son muy fáciles para quien domina el Excel. Toda iteración puede implicar efectos diversos sobre las variables de la simulación. En algunos casos, un escenario hará incrementar los costos fijos, subir el costo unitario variable de algunos insumos (deseconomía de escala) y bajar otros (economías de escala). Para ver el impacto real de cada iteración, cada vez que se analiza un escenario, debe garantizarse que el modelo por si sólo utilizará los valores correspondientes a cada escenario. Lamentablemente, no vemos que exista el suficiente dominio sobre el Excel,por o que muchos escenarios no reflejan el efecto real en su resultado.

Cristóbal Vega dijo...

Estimado Profesor, entiendo el tema de la poca confianza que tendría un proyecto de mas de 10 años (que como usted dice son generalmente los más comunes) aplicarle tratamiento de inflación en la evaluación de proyectos, pero de ser el caso que fueran 5 años, como es el caso que muestra Ignacio Vélez Pareja en su paper "Evaluación de proyectos en inflación", extraído del libro "Decisiones de Inversión. Enfocado a la valoración de Empresas", 2001, Donde el demuestra que en países con inflación de 1 digito, como seria el caso de Chile, "Las
metodologías de precios y pesos constantes son sesgadas y sobrevaluan un proyecto. Estas
metodologías simplifican en exceso la realidad y producen resultados indeseables."
Otra duda es, que tan confiable puede ser este paper, al concluir algo distinto a usted, que errores podría haber cometido este autor o es solo por el tema que no ocupa flujos de caja de más de 5 años?.