Valor de la información



─ ¡Bapi! Acuerbate que añama amos al hine!— le dice con la boca llena de tallarines mi ahijado a su papá mientras estábamos almorzando .

─ ¿Qué te dijo este … niño? No le entendí nada— le digo con harta molestia a mi compadre, esperando que no se haya percatado que casi le digo imbécil.

─ Me recordaba que le prometí llevarlo al cine mañana.

─ ¿No crees que ya deberías enseñarle buenos modales? Tiene 18 años y sigue hablando al mismo tiempo que come─ le digo con toda buena fe.

─ No─ me dice con resignación─ prefiero que hable con la boca llena y nadie le entienda a que lo haga con el cerebro vacío y todos se den cuenta.



El estudio de proyectos tiene como principal objetivo  generar información para que cuando se tome una decisión se haga sobre una base lo más objetiva posible. Nunca tendremos la información completa para emitir una opinión cierta acerca de la conveniencia de hacer una inversión. Pero cualquiera sea la que se obtenga, siempre será mejior que tomar la decisión desinformadamente.

Leasing

- ¿Por qué tan contento compadre? - le digo a mi buen amigo y ex compañero de curso del Instituto del Puerto de San Antonio.
- Porque al fin pude comprarle el refrigerador a mi señora.
-¿Cuál? ¿el que le prometiste hace 39 años para tu matrimonio?
- Ese mismo- me responde feliz. -Fui a la tienda y casi me desmayo cuando vi el precio. Imagínese compadre ¡$100.000!. Y yo iba con $20.000. ¡Cómo han subido de precio en estos 39 años!
- ¿Y cómo lo compraste si no tenías todo el dinero?- le pregunto con curiosidad.
- Se me acercó el vendedor y cuando me preguntó si me podía ayudar en algo le dije "Claro, présteme $80.000".
- ¿¿Y te los prestó??- le respondo con asombro
- No. Me dijo si estaba loco. Pero cuando le conté el problema me ofreció pagarlo en cuotas. Una de $20.000 al contado y cinco más de $20.000.
- ¡Pero si eso significa que te están cobrando casi un 8% de interés mensual!¿Por qué no esperaste unos meses y ahorrando podrías haberlo comprado sin endeudarte ni pagar intereses.
- Tranquilo compadre. No lo compré ahí. Fui a otra tienda a cotizar y me encontré con la sorpresa de que daban hasta cinco meses precio contado. Entre, estaba el mismo refrigerador y lo compré. El precio era un poco más alto, $120.000, pero me evité los intereses usureros.
- ¿Y cuanto pagaste en cuotas?- le consulto intrigado.
- Una cuota contado de $20.000 y, como no me cobró intereses, los $100.000 que le quedé adeudando se los pagaré en cinco cuotas de $20.000.


Igual como una casa comercial que muestra una mayor tasa porque tiene un precio contado más bajo, un proyecto que se financia con leasing hace caer el valor inicial de la inversión y aumenta la TIR respecto al mismo proyecto si se anota el total de la inversión. 
Cualquiera financiamiento (deuda, leasing, subsidio) que haga reducir la inversión no mide la rentabilidad del proyecto. Solo la de los recursos propios, por lo que no puede compararse un proyecto financiado con otro puro. Tampoco si dos tienen un monto distinto de su inversión inicial.