Los objetivos de San Pedro

Una señora reconocida por su pésima forma de conducir, un día choca contra el vehículo del párroco del pueblo y ambos mueren. Cuando se presentan ante San Pedro, este deja pasar a la dama directamente al cielo, pero al párroco lo interroga largamente. Molesto, éste le dice a San Pedro: "¿Cómo deja pasar a esa señora que ni siquiera es católica y a mi lleva 45 minutos interrogándome? Creo que aquí hay un lamentable error." Pero San Pedro le responde "No hay ningún error. Cuando usted predica la mayoría de los feligreses se duerme, pero cuando ella conduce, todo el pueblo reza. Y usted sabe, los objetivos son los objetivos".
Muchas veces el objetivo de un proyecto no es económico: reducir las listas de espera en los hospitales, razones estratégicas o de seguridad nacional, éticas o humanitarias. Como en estos casos hay una meta definida, lo que debe buscarse es cómo alcanzar el objetivo de la manera más eficiente posible. De aquí surge la diferencia más básica entre el VAN y el VAC. La letra N del VAN significa neto, es decir, la diferencia entre beneficios y costos, y la C del VAC costo. El primero indica que si el resultado es negativo, no se cumple la condición de elegibilidad; el segundo siempre será negativo e indica cuánto cuesta alcanzar el objetivo.

1 comentario:

Candrada dijo...

Ojalá que la iglesia católica no te excomulgue por semejante anécdota...:-)