Autolamento

- "¿Por qué esa cara Jorge?"
- "Estoy muy preocupado por el futuro de mi proyecto, Hugo"
- "Quédate tranquilo Jorge. Dios no nos manda más fatalidades de las que podemos resistir"
- "Puede ser. ¡Pero cómo quisiera que no tuviera tan buena opinión de mí!"

Un buen emprendedor, cuando ve que su entorno cambia, que los presupuestos no se están cumpliendo ni las metas alcanzando, trata de redefinir su proyecto adaptándolo a las nuevas condiciones. El resto, intenta alcanzar los resultados originalmente previstos a cualquier costo. Aunque la mayoría de los textos enseñan a medir la rentabilidad de la creación de nuevos negocios, la formulación, preparación y evaluación de proyectos tiene tanta o más importancia en analizar proyectos en empresas en marcha. El reemplazo oportuno de un activo, el cierre a tiempo de un área de negocios, la ampliación de actividades, la externalización de servicios o la integración de procesos son tareas de permanente evaluación. Frente a una situación de cambio, hay diferentes tipos de reacciones: a) la evasión, donde se decide desistir de continuar el proyecto, ya sea abandonándolo o modificándolo; b) la transferencia del impacto para que las consecuencias las asuma un tercero (por ejemplo, externalizar parte del proceso en un ambiente de frecuentes cambios tecnológicos); c) la mitigación del impacto, tomando un seguro de tipo de cambio, por ejemplo; y d) la aceptación del suceso, luego de determinar que continuar tiene menos costos que abandonar. La mejor de las cuatro lo define la denominada Evaluación de Proyectos en Marcha, que identifica las opciones, cuantifica sus costos y beneficios y mide su rentabilidad y riesgo.

4 comentarios:

Héctor Rodríguez Pérez dijo...

Estimado:

Ser un emprendedor en Chile, es una tarea difícil, no por que falten "conocimientos" sino más bien porque los instrumentos fiscales que involucren FONDOS del estado (Fondos concursables) tienen una nivel de dificultad notable y enfocada a personas con EXPERIENCIA, dejando a los jóvenes fuera de este, cerrándole las puertas al emprendimiento. Por un lado, pienso el “porque”, pero por otro veo como buenas oportunidades para el país y para los mismísimos jóvenes se van quedando atrás por estas razones. Hace un tiempo, leí el reportaje de la CUNA del EMPRENDIMIENTO, en california (por esto del tratado de CHILE-CALIFORNIA, que pronto formulare un articulo al respecto ya que lo encontré muy bueno) que GRANDES ideas que ahora son negocios lucrativos como “Google” ó “Facebook” en su tiempo FUERON RECHAZADOS, por razones que eran MALOS negocios, pero que en este ESTADO, fueron MOTIVANDO a los alumnos de estos proyectos, abriéndoles puertas e incentivándolos a seguir con su negocio, cosa que en nuestro país no lo es. ¿Falta de cultura emprendedora?, Demasiada aversión al riesgo por parte del estado? Varias preguntas, y pocas respuestas.

Un fuerte abrazo estimado y a Fernando que de seguro escribirá si es que no lo ha hecho antes o durante escribo este post.
Saludos queridos amigos.

Héctor Rodríguez.

Nassir Sapag Chain dijo...

Hoy me llevé una gran sorpresa estimado Héctor. En una investigación que llegó a mis manos,no aparece la falta de recursos entre las cinco primeras restricciones que los jóvenes mencionan para emprender. Lo veré con calma y lo comento. En todo caso hay falta de cultura emprendedora, en el gobierno, las universidades y los educadores. Nuestro desafío es romper la indiferencia. Un abrazo

Héctor Rodríguez Pérez dijo...

Y Fernando Romero? hace dias que no lo he visto postear por estos lugares, un abrazo! de todas formas.

He empezado actualizar mi blog estimado, ya que lo tenia bastante botado.

Saludos,

Héctor Rodríguez Pérez

Nassir Sapag Chain dijo...

Lo que pasa Héctor es que dejó de ser independiente y está trabajando en un fideicomiso....pero conociéndolo, ya volverá.